Tenés algo de Depeche?

Ser Dj es un desafío enorme. Básicamente está en sus manos el éxito o el fracaso de una fiesta. Su misión es conquistar la voluntad de los bailarines de turno que llegan a la pista y que si no son correctamente estimulados se alejan desinteresados. Porque una pista es un ser vivo, crece, respira, muta, y hay que alimentarla para que no muera. Es como prender una fogata, lleva su tiempo... si mandamos de una todo lo que tenemos a mano, se hacen llamas enormes y brillantes pero se quema en un segundo, no sirve. Una vez que tenemos a la pista en movimiento no hay que distraerse ni un segundo, si decae, hay que echar mano de un Billy Idol, un Madonna, un Sweet dreams are made of this... eso vendría a ser como soplar de abajo cuando el fuego se está apagando. Ahora, cuando queremos echar leña con algún hit inolvidable y le pifiamos, es como tirarle un baldazo de agua, y queremos arreglarla y peor, le tiramos arena! También depende del tipo de pista que tengan enfrente, las hay renuentes y hoscas, que no te bailan ni por equivocación, y están las de los casorios que te bailan hasta un loco mía porque están entregadísimos desde el vals. En definitiva, lo que digo es que hay que pensarlo dos veces cuando nos piden pasar música en una fiesta, porque ser Dj no es moco de pavo, no es soplar y hacer botellas, no es poner un cd de lo mejor de los 80´s y ponerse a chusmear.