Ingrid, ¿te creo o no te creo?

Primero la noticia mundial, las imágenes, los discursos. Luego algunas dudas. Más de un sorprendido preguntando ¿las FARC tienen helicópteros? Muchos expertos de última hora respondiendo con seguridad que por supuesto y demostrando con teorías desarrolladas entre papas fritas y cerveza cómo es posible que los tengan aún siendo aparatos tan difíciles de hacer pasar desapercibidos. Algunos dicen que esta liberación fue un circo, que estaba todo arreglado… Pero hubo gente que se emocionó hasta las lágrimas al ver el reencuentro, así como también hubo gente que ni se mosqueó porque lo que le parece verdaderamente emocionante es el nacimiento del hijo de un amigo.
Encima me topé con ese documental que anda dando vueltas por la interné, "Zeitgeist", iconoclasta y cuestionador de supuestas verdades históricas antiguas y recientes. Que pronostica un futuro donde estaremos todos enchipdos, y no por comer chipa sino por tener subcutáneamente implantado un chip que le permitirá al Estado monitorearnos constantemente.
A esta altura, creo que ya no hay nada más trillado que demonizar a los medios de comunicación, acusarlos de vedarnos la verdad con entretenimiento y frivolidad, de ser el arma más poderosa para alienar a la humanidad y mantenerle el cerebro adormecido, para que “ellos” puedan seguir adelante con el master plan.
¿No será demasiado omnipotente subestimar a tantos millones de personas que cuando vuelven del trabajo miran un rato la tele en vez de investigar las conspiraciones que oprimen a la sociedad toda? ¿Seremos todos tan giles?
Una persona me dijo que la humanidad históricamente mejora, muy lentamente, pero mejora. Que hay más gente buena que gente enferma (mala).
En fin...
(pobre Ingrid, no va a poder dormir pensando si yo le creo o no le creo…)